PYMES Y TECNOLOGÍA – Las pymes españolas evolucionan con la tecnología

pymes y tecnología. La falta de planificación, la falta de una estrategia suficientemente sólida y la falta de compromiso con la innovación, se encuentran entre los tres principales errores que cometen las pymes en la gestión de su actividad diaria. Como contrapunto, la confianza que han depositado en la tecnología para abordar determinados procesos, es uno de los mejores aciertos de las pequeñas y medianas empresas, según aseguran desde la compañía Datisa (www.datisa.es), uno de los principales desarrolladores de software de gestión empresarial para las pymes en España.

Y es que las pymes siguen cometiendo graves fallos en el entorno del management. “Este tipo de compañías han avanzado mucho en los últimos años. Sin embargo, siguen teniendo ciertas debilidades que, de abordarlas con energía y consistencia, podrían convertirse en grandes oportunidades de negocio”, dice Isabel Pomar, Directora Comercial y de Marketing de Datisa.

Así, los errores que cometen las pymes son tres:

Falta de presupuestos: aunque la planificación es una tarea completamente asimilada y establecida en las grandes empresas, las corporaciones más pequeñas no sólo carecen de presupuestos en sus diferentes áreas operativas (ventas, producción, tesorería…) o una previsión de las inversiones que abordarán en el medio plazo, sino que les falta planificar incluso, a nivel general, centrándose excesivamente en los movimientos que acontecen en el mercado. La falta de una cultura de planificación. que permita establecer unos objetivos claros y medir y ajustar a lo largo del tiempo sus metas y logros, es una de las principales carencias a solventar.

Falta de estrategia sólida: muchas pymes construyen su estrategia en base a la información que han obtenido del pasado, pero pocas lo hacen con una visión prospectiva que les permita realmente, abordar el futuro con garantías. La visión retrospectiva lastra los movimientos de unas organizaciones que, generalmente, suelen tener los recursos limitados y poco margen para cometer errores.

Falta de compromiso real con la innovación: hay muchas pequeñas y medianas empresas que permanecen ancladas, no sólo en su modelo de negocio, sino en su forma de llevarlo a cabo. Es decir, hacen siempre lo mismo y de la misma manera. Esto es algo que choca con una condición intrínseca de las pymes: su flexibilidad. Este tipo de organizaciones son, por norma general, mucho más flexibles que las grandes empresas. Son flexibles en su estructura administrativa, productiva, comercial… Sin embargo, son poco innovadoras a la hora de diversificar productos/servicios, canales de venta o de desarrollar nuevos procesos de negocio. Por lo tanto, a pesar de ser flexibles son poco valientes a la hora de innovar, aunque esa innovación pudiera mejorar sus ratios de eficiencia.

Por su parte, en ese binomio pymes y tecnología el acierto es:

Confianza en la tecnología: en la evolución del management de las pymes, la tecnología ha jugado un papel determinante. La confianza que han depositado este tipo de organizaciones en aplicativos y soluciones tecnológicas para apoyar la gestión de diferentes áreas (comercial, administrativa, financiera, producción…) ha sido determinante para mejorar su competitividad en el mercado. En los últimos tiempos, su apuesta por el cloud y por los diferentes modelos de explotación les han permitido, además, acceder a herramientas más complejas y avanzadas.

Así pues, la relación pymes y tecnología continúa evolucionando, si bien todavía tienen puntos de mejora, en todo lo relativo a su gestión diaria.