Reflexiones que las pymes han de hacerse antes de que termine 2020

El año 2020 va a ser un año que, inevitablemente, va a estar marcado por la pandemia. La crisis sanitaria ha golpeado fuertemente a todos los niveles de la sociedad. A nivel empresarial, la vía de salida ha sido la capacidad de adaptación y la reinvención.

Tal y como se destaca desde Woffu, startup especializada en la optimización de la gestión del tiempo de los empleados, es momento de hacer balance y reflexionar sobre lo que se ha estado haciendo y cómo, para, en el futuro, no cometer los mismo errores y localizar fuentes de inspiración que lleven al éxito en tiempos de incertidumbre como el actual.

1. ¿Cómo realizar las evaluaciones de desempeño de 2020?
Que la pandemia haya parado un poco las vidas personales y profesionales no significa que la empresa deba detenerse del todo. Durante este 2020, especialmente desde marzo, se han producido muchísimos cambios. Algunos han hecho aparcar algunas tareas para focalizar la atención en otras, como, por ejemplo, la implementación del teletrabajo. A pesar de eso, la obligación de evaluar el desempeño de los profesionales que trabajan en la empresa sigue estando vigente. Con más razón todavía si parte de ellos están trabajando desde sus casas. Medir la productividad de los empleados, conocer cuáles han sido sus progresos y tener en cuenta sus dificultades es imprescindible para que nuestro equipo humano siga siendo el que era. Hay que tener en cuenta, tal y como apuntan desde Woffu, que a muchas personas trabajar desde casa les genera cierta inquietud, porque no reciben el apoyo de su equipo o superiores a diario. Realizar una buena evaluación de desempeño les hará sentir seguros, reconocer cuáles son sus fortalezas, observar las nuevas debilidades o carencias que hayan podido surgir y tratar de atajarlas con claridad y honestidad de cara a 2021.

2. ¿Hemos sido capaces de aplicar con garantías el teletrabajo?
Salvando aquellas empresas cuya labor mayoritaria debe ser presencial (tiendas con atención al público, centros médicos, restauración, manufactura…), son muchas las organizaciones que han tenido que destinar todos sus esfuerzos y recursos al teletrabajo. Este año también ha traído consigo, aunque sea motivada por la pandemia, la nueva Ley del Teletrabajo en la que se regulan los derechos y obligaciones de empresas y trabajadores. En esta se da un margen de tiempo a todas aquellas organizaciones que decidan implementar el teletrabajo más allá de la situación actual, teniendo en cuenta unas normas y obligaciones. Si la empresa tiene gran parte del equipo teletrabajando, ha llegado el momento idóneo para reflexionar acerca del esfuerzo que habéis hecho en esta dirección. Es clave que se termine de pulir el acuerdo de teletrabajo que estará vigente para las personas de tu empresa que quieran teletrabajar, observar (a través de cuestionarios y consultas) cuáles son las sensaciones que acompañan a los profesionales en este proceso, detectar posibles carencias y encontrar soluciones tecnológicas que puedan ayudaros a hacerlo todo más fácil.

3. ¿Qué se ha hecho para ayudar a los empleados?
Para muchas empresas 2020 ha estado lleno de momentos complicados. También para las personas que forman parte de estas organizaciones y que han tenido que hacer malabarismos para montar de la nada su oficina en casa, educar a los hijos, cuidar de sus familiares y gestionar las grandes dosis de incertidumbre que ha traído esta situación actual. En este sentido, desde Woffu sostienen que la empresa tiene que hacer la reflexión y preguntarse: “¿Durante este tiempo, hemos sido capaces de ayudar a nuestro equipo a salir adelante?”. La conciliación era ya una asignatura pendiente antes de la pandemia. Hoy, más que nunca, los profesionales necesitan certezas, apoyo y comprensión. La implantación del teletrabajo es un paso muy importante para avanzar en esta dirección. Pero hay que asegurarse de hacerlo con garantías, comprendiendo que las jornadas maratonianas de trabajo no son sinónimo de productividad.

4. ¿Es este un buen momento para hablar sobre salarios?
No es un momento fácil para nadie, pero ¿son las situaciones de crisis el momento idóneo para hablar de subidas salariales? Probablemente no para la empresa. Sin embargo, alargar este planteamiento en el tiempo no conducirá a nada bueno, ni para los trabajadores ni para la organización. Desde Woffu se aconseja que lo ideal es apelar a la responsabilidad y la confianza. Cada caso debe ser revisado con detenimiento. Puede que haya personas que están esperando una subida salarial o un cambio de responsabilidades desde hace tiempo. Estas deben ser, además, conscientes del momento que la empresa atraviesa para saber ser prudentes y esperar unos días. Las noticias no son muy alentadoras en este sentido, porque algunas empresas preparan recortes, congelaciones y rebajas salariales para poder capear la crisis. Todos deben permanecer expectantes para que esta situación no termine recortando derechos y expectativas e incremente peligrosamente la rotación y la fuga de talento.

5. ¿Cómo se puede empezar con buen pie el nuevo año?
2021 será un año igualmente movido. ¿La empresa será capaz de recuperarse? La respuesta a esta pregunta debe mirar, inevitablemente, al camino recorrido hasta ahora. Es muy importante tener claros cuáles serán los objetivos a corto y largo plazo. Y enfocar la estrategia a recorrer durante los próximos 12 meses. Al mismo tiempo, debemos abordar este nuevo ciclo sabiendo qué errores se han cometido, las posibles deficiencias del sistema de trabajo y, por supuesto, anotar todas aquellas cosas que se pueden hacer para mejorar y tratar de ponerlas en marcha en el próximo año.
Antes de cerrar 2020 todavía hay unos días para preparar el terreno y comenzar a implantar aquellas soluciones que ayuden a resolver problemas, aumentar la eficiencia y hacer, en definitiva, de 2021 un año memorable para todos.