Silvia Campaña, abogada: ¿y ahora qué?

Esta es la pregunta que surge cuando vamos a cambiar de compañía telefónica, queremos financiar un electrodoméstico o contratar una hipoteca y nos lo deniegan por estar incluidos en ASNEF, EXPERIAN o BADESCUG, o lo que suena peor, “estás en un fichero de morosos”. ¿Y ahora qué?

Esta es una práctica que se ha dado siempre, pero quizás en los últimos tiempos está más de moda que nunca por parte de las entidades financieras. Devolvemos un recibo porque no estamos de acuerdo con lo que nos han cobrado y, la gran mayoría de las veces, incluyen nuestros datos en estos registros de morosos, en los que es muy fácil entrar, pero más difícil salir.

Como dice el Tribunal Supremo en su sentencia de 23 de marzo de 2018 (y afortunadamente cada vez más juzgados de toda España), las empresas no nos pueden incluir en estos ficheros como medida de presión para que paguemos la “supuesta deuda” que nos reclaman, por no aparecer en estos registros y que nos nieguen un crédito, o el cambio de una compañía a otra, lesionando nuestro derecho al honor.

Existen muchas situaciones en los que nuestro honor puede verse vulnerado y por eso tenemos derecho a una compensación económica. Por ejemplo, y al hilo del artículo anterior de las tarjetas revolving, si la supuesta deuda de la tarjeta es litigiosa (ya hemos presentado demanda en el juzgado), si es controvertida, porque consideramos que su pago no es procedente (por ejemplo, hemos presentando una reclamación extrajudicial al SAC de la entidad) o porque ya hemos pagado la deuda que nos reclamaban y seguimos en el fichero.

Cuando las empresas facilitan nuestros datos, el fichero tiene que ponerse en contacto con nosotros en un plazo máximo de 30 días para informarnos de ello. Si nadie nos ha informado, y nos encontramos con el problema, podemos solicitar la cancelación de nuestros datos y, lo que es más importante, podemos reclamar una indemnización, por haber vulnerado nuestro derecho al honor.

Y, la pregunta del millón, ¿qué indemnización puedo reclamar? Pues dependerá del tiempo en el que hayamos permanecido en el fichero, cuántas empresas han consultado nuestros datos y los perjuicios que nos han podido causar si, por ejemplo, nos deniegan una hipoteca por aparecer en estos ficheros.

Para conocer de primera mano si estamos incluidos en alguno de estos registros, qué empresa ha facilitado nuestros datos, en qué fecha y por qué importe, lo primero que hay que hacer es mandar un email a estos ficheros rellenando el formulario de acceso y mandarlo firmado junto con la copia de nuestro DNI a las siguientes direcciones:
– https://assets.equifax.com/assets/spain/consulta_agil_ficheros.pdf, a sac@equifax.es
– https://www.experian.es/content/dam/marketing/emea/spain/es/assets/legal/Modelo-de-solicitud_BADEXCUG.pdf, a badexcug@experian.com

En unas semanas recibiremos la información solicitada y ya sabremos por dónde empezar para ver salvaguardados nuestros derechos.